No hace falta ser una gran empresa para hacer grandes cosas. No hace falta ser un genio y crear algo fascinante y que cambie el mundo. A la hora de trabajar por tu cuenta solo hace falta que seas tú mismo, como punto de partida para cambiar tu realidad, y utilizar adecuadamente todos los recursos a tu disposición. Por lo tanto:
1. Pregúntate quién eres, qué es lo que quieres y en qué aportas valor, y cómo crees que lo aportas. Pregúntate en qué destacas.
2. Pregunta a tu entorno quién eres, en qué aportas valor y cómo lo aportas. Pregunta a tu entorno en qué destacas.
3. Con esta información decide qué hacer, márcate un objetivo y ve a por ello.
4. Pregúntate a ti mismo en qué puedes mejorar para alcanzar ese objetivo.
5. Pregunta a tu entorno en qué puedes mejorar para alcanzar ese objetivo.
6. Con esta información diseña una ruta para mejorar, a través de formación presencial u on-line, a través de lecturas, blogs, conversaciones, o contrastando con personas de diferentes disciplinas, mayores, niños….
7. Ahora enfócate en tu producto o servicio, y pregúntate qué soluciones puedes ofrecer, pregúntate a quién se lo quieres ofrecer y pregúntate qué necesidades puedes cubrir.
8. Pregunta a tus potenciales clientes qué necesidades quieren o necesitan cubrir y si tu producto o servicio las cubre, y si no las cubre pregunta qué debes mejorar o cambiar para que las cubra.
9. Y analiza lo “bueno” que hace tu competencia, y aplica lo que te valga, y analiza lo “malo” que hace tu competencia, y mira si a ti te funcionaría, nunca se sabe. Ponle tu “sello” personal, tu estilo, tu esencia.
10. Con esta información aplica lo que consideres y saca tu producto o servicio a la calle, analiza y verifica los resultados.
11. Si funciona pregunta a tus clientes en qué puedes mejorarlo, si no funciona pregunta a tus clientes en qué puedes mejorarlo. Escúchalos y aplica las mejoras que creas conveniente. Ponte a ello y lo vuelves a sacar a la calle, y analiza y verifica los resultados.
12. Y sigue enfocándote al producto o servicio, en cómo puedes mejorarlo, en cómo lo puedes hacer llegar mejor a tu cliente objetivo, en cómo puedes mejorar tus procesos productivos o metodologías o materiales que utilizas, en cómo lo puedes adaptar a las necesidades específicas de cada cliente, zona o cultura a la que te dirijas.
13. Y no olvides volver a preguntar, escuchar, actuar, verificar, equivocarte o acertar y volver a preguntar, escuchar, actuar, verificar, equivocarte o acertar y volver a preguntar…
En definitiva, crea, integra, adapta, pregunta, escucha, aprende, lee, mejora, segmenta, trabaja, arriesga, equivócate, acierta, cultiva, educa, interactúa, comunica, comparte, colabora, genera oportunidades, innova, analiza, investiga, verifica, evoluciona, llega, impacta y harás grandes cosas, Si no funciona, si no te llena, vuelve al punto uno, quizás no era lo que querías, quizás tu proyecto no es lo que eres.